Agricultores levantan bloqueos en Francia, mientras en la frontera entre Bélgica y Países Bajos inician otros

Mientras en Francia los agricultores empiezan a levantar los bloqueos, en la frontera entre Bélgica y Países Bajos la protesta recién empieza.

A lo largo del territorio francés los manifestantes despejan poco a poco las vías este 2 de febrero, en un voto de confianza a las medidas anuncias por el Gobierno un día antes, pero advierten que quieren cambios “concretos”.

"No estamos 100% satisfechos. Es cierto que se han tomado medidas, siempre es mejor que nada, pero no vamos a dejar que las cosas sigan así (…) También estábamos esperando las medidas escritas, porque estamos acostumbrados a que haya muchas palabras bonitas, pero que no se respetan, así que hay que tener cuidado”, aseguró a Reuters Guillaume Chantereau, un productor de cereales y criador de gallinas, en Nemours, Seine-et-Marne, en el norte del país.

Tras más de dos semanas de movilizaciones y mientras el enojo de los trabajadores del campo se extiende a otros países europeos, el jueves 1 de febrero, el primer ministro francés, Gabriel Attal, anunció algunas medidas de alivio para el sector agrícola.

Entre ellas, Attal prometió 150 millones de euros en ayudas fiscales y sociales para este año, y lo que llamó cláusulas de salvaguarda, incluida una que veta "la importación de frutas y verduras tratadas con pesticidas que están prohibidos" en Europa. "Es el símbolo de una nueva política, una cláusula espejo", aseguró.

Asimismo, París prometió eliminar los planes para aumentar las contribuciones fiscales al diésel de los tractores, flexibilizar las regulaciones sobre pesticidas, una pausa en las nuevas normas sobre la retirada de tierras y más controles de seguridad de los alimentos importados.

Los trabajadores del campo protestan por el aumento en los costos de energía, la subida de los precios de insumos como los fertilizantes, el incremento de importaciones en el bloque de alimentos más económicos que los cultivados en la UE y las cada vez más estrictas reglas del bloque de 27 naciones para el sector, en medio de medidas ambientales, pero que los manifestantes califican de burocracia y “asfixiantes”.

"Los bloqueos de carreteras se están levantando región por región. Algunos todavía están en pie, pero poco a poco, durante la mañana, serán eliminados", sostuvo a la radio ‘franceinfo’ Jerome Despey, un alto responsable de la Federación Nacional de Sindicatos de Agricultores (FNSEA).

El regreso de los agricultores a sus lugares de trabajo representa un respiro para el Gobierno de Emmanuel Macron, pero el primer ministro reconoció este viernes que aún falta trabajo por hacer. "Los agricultores no nos han dado vía libre para la eternidad", subrayó Attal.

Los agricultores franceses remarcaron que el Gobierno de su país ahora debe actuar con agilidad y cumplir sus promesas.

Agricultores bloquean la frontera entre Bélgica y Países Bajos

Inspirados por las protestas de sus vecinos de Francia y tras movilizaciones similares en Alemania y Polonia, a finales de 2023, los bloqueos iniciaron en Bélgica el pasado lunes 29 de enero, pero este viernes 2 de febrero, los bloqueos se extendieron a la frontera entre el territorio belga y Países Bajos.

El paso limítrofe en dirección a Amberes, la segunda ciudad más grande de Bélgica y sede del segundo puerto más grande de Europa, es uno de los pasos obstruidos.

Esta nueva manifestación inició menos de un día después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reuniera con representantes de los agricultores, en un intento por calmar el descontento.

El encuentro se produjo justamente poco después de que terminara la cumbre de la UE, la cual se desarrolló al tiempo que cientos de tractores bloquearon las calles adyacentes al Parlamento Europeo, en el centro de Bruselas, y algunos manifestantes prendieran fuego a barricadas.

Además, los manifestantes belgas y neerlandeses siguen impidiendo que los camiones entren o salgan del puerto de Zeebrugge, que gestiona las importaciones de automóviles y algunos productos frescos del Reino Unido y otros lugares.

El primer ministro belga, Alexander De Croo, instó a sus agricultores a levantar los bloqueos. Un llamado aún infructuoso.

España y Polonia se unirían a las movilizaciones

Las protestas y enormes bloqueos a las vías en las conectadas naciones europeas podrían extenderse aún más. Los trabajadores del campo en España señalaron que se unirían “en las próximas semanas” a las movilizaciones, aunque este 2 de febrero se registró una pequeña manifestación con una treintena de camiones entre las localidades de Azuaga y Llerena, en el occidente del país.

Rápidamente, el Gobierno de Pedro Sánchez intentó zanjar una situación similar a la de sus vecinos y este viernes el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, sostuvo una reunión con las asociaciones agrícolas COAG, Asaja y UPA.

Pero el encuentro no logró calmar los ánimos y los trabajadores del campo indicaron que seguirán adelante con la convocatoria. Al igual que sus colegas de los otros países de la UE, en el territorio español estos ciudadanos exigen principalmente reducir los costos de producción y los trámites burocráticos, que consideran “excesivos”, para poder trabajar la tierra, en medio del impulso de la Unión Europea por abordar el cambio climático.

Entretanto, en Polonia, el sindicato de agricultores Solidaridad planea una huelga general a partir del próximo viernes 9 de febrero, con un bloqueo de los cruces fronterizos entre su país y Ucrania.

"Se nos ha acabado la paciencia. La posición de Bruselas es inaceptable para toda nuestra comunidad agrícola (…) Además, la pasividad de las autoridades polacas y las declaraciones de cooperación con la Comisión Europea, con respecto a la importación de productos agrícolas y alimentarios de Ucrania no nos dejan otra opción que declarar una huelga general”, afirmó el sindicato en un comunicado.

En Grecia, donde también reina el descontento del sector agrícola, el Gobierno anunció que ampliaría por un año una devolución fiscal especial sobre el diésel para ayudar a apoyar a los agricultores, cuyas demandas también incluyen energía eléctrica más económica y una compensación más rápida por las cosechas y el ganado perdidos por las inundaciones.

Con Reuters, AP y medios locales